Wellness, la nueva tendencia que redefine el valor inmobiliario
El sector inmobiliario atraviesa una transformación en la que compradores y desarrolladores no solo buscan metros cuadrados o ubicación: buscan bienestar.
Esta nueva prioridad ha dado forma a una tendencia global conocida como “Wellness Real Estate”, que redefine el valor de los espacios habitacionales y comerciales al integrarlos con experiencias enfocadas en la salud física, mental y emocional.
De acuerdo con el Global Wellness Institute (GWI), este segmento casi duplicó su tamaño entre el 2019 y el 2024, con lo que alcanzó un valor estimado de 548,000 millones de dólares, un crecimiento promedio anual de 20 por ciento.
Las proyecciones del GWI apuntan a que el mercado global podría superar los 1.1 billones de dólares hacia el 2029, impulsado principalmente por el segmento residencial, que representa cerca del 60% del total.
Estos desarrollos no se limitan a ofrecer amenidades básicas como gimnasios o albercas, sino que incorporan sistemas de purificación de aire, espacios terapéuticos, servicios médicos básicos y entornos de convivencia saludables.
Para Paulette Lecuona, directora Comercial de Grupo FREL, el concepto de ‘Wellness Real Estate’ no es una moda, sino una respuesta a la creciente demanda de las personas por vivir en entornos que no solo sean funcionales, sino que también contribuyan activamente a su calidad de vida.
“No se están vendiendo propiedades o rentando oficinas tradicionalmente; hoy se está construyendo un ecosistema de bienestar para los grandes corporativos que impacta directamente en los colaboradores”, afirmó.
Más allá de lo residencial
Si bien, el segmento residencial es el principal motor, el concepto wellness ha trascendido a otros ámbitos del mercado inmobiliario.
El turismo de bienestar global, por ejemplo, supera ya los 651,000 millones de dólares, con inversión en destinos que integran salud, naturaleza y hospitalidad como eje de su modelo de negocio.
Asimismo, los desarrollos de usos mixtos representan más del 20% de la inversión inmobiliaria en esta tendencia, al atraer capital institucional gracias a su capacidad para diversificar ingresos y atender múltiples necesidades —habitacionales, comerciales y corporativas— en un solo espacio.
En el sector corporativo, más del 42% de los nuevos proyectos de oficinas premium en las principales ciudades del mundo incorporan certificaciones de bienestar como WELL o Fitwel.
En México, The Summit, un desarrollo de Grupo FREL, es un ejemplo de la arquitectura con enfoque wellness. El edificio de uso mixto combina espacios de trabajo flexible, tecnología de punta y áreas comerciales centradas en el bienestar.
“Lo importante es anticiparse: el mercado ya no demanda espacios, demanda bienestar. Estamos construyendo comunidades más saludables y resilientes, con productos diseñados específicamente para las necesidades de cada segmento, desde residencial hasta corporativo”, concluyó Lecuona.