Trump y Starmer cierran con un acuerdo de inversión en tecnología la visita de Estado del presidente al Reino Unido
Nada podría haberse desarrollado mejor, en términos diplomáticos. La cena de Estado ofrecida este miércoles por Carlos III de Inglaterra al matrimonio Trump en el castillo de Windsor colmó todas las expectativas de pompa y ceremonia del presidente estadounidense, que aseguró durante el banquete que se trataba de “uno de los mayores honores de su vida”. Este jueves, sin embargo, queda la prueba política: una rueda de prensa conjunta con el primer ministro británico, Keir Starmer, en la que ambos deberán sortear asuntos espinosos como el caso Epstein, que ha salpicado a ambos gobiernos, la tragedia de Gaza, el reconocimiento del Estado palestino o la parálisis en la búsqueda de la paz en Ucrania.