Sin digitalización, los condominios enfrentan desorden, fraudes y mala convivencia

En México, la administración de condominios enfrenta un reto: la falta de digitalización y transparencia. A pesar del crecimiento de la vivienda vertical, la mayor parte de los edificios todavía opera con procesos manuales que abren la puerta a errores financieros, incluso fraudes.
De acuerdo con Vicente Mondaca Ubilla, gerente general de Comunidad Feliz México, en el país existen más de 130,000 condominios, pero solo tres de cada 10 de los administradores utilizan plataformas tecnológicas para gestionar sus operaciones.
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“Hoy en día, muchos administradores siguen usando hojas de Excel o incluso libreta y pluma para llevar la contabilidad y la organización del edificio. Eso genera desorden, falta de claridad financiera e incluso abre la puerta a fraudes o mal manejo de recursos”, explicó en entrevista.
Las plataformas digitales permiten automatizar y transparentar procesos como el registro de pagos de cuotas de mantenimiento, ingresos al fondo de reserva o gastos mensuales. Así, no solo brindan mayor eficiencia a los administradores, sino que también ofrecen a los residentes el acceso en línea a sus movimientos, lo que mejora la confianza y la convivencia.
Sin embargo, la adopción de tecnología en los edificios habitacionales tiene una barrera: la capacidad de pago de los residentes. Según Mondaca, estas herramientas son más contratadas para vivienda de segmento medio y alto. En contraste, el segmento económico ha tenido más dificultades para acceder a ellas por cuestiones de presupuesto, a pesar de que el costo es relativamente accesible.
“Buscamos desarrollar un producto que quizá tenga menos funcionalidades, pero que solucione el problema medular de administración y transparencia. De esa manera este segmento tendría las oportunidades de digitalizarse”, comentó Mondaca.
Urge ley común
Actualmente, Comunidad Feliz opera en 900 condominios en México, con presencia en 28 de las 32 entidades del país. La plataforma ha creado un ecosistema de soluciones digitales que incluye no solo gestión de pagos, sino también administración de amenidades y comunicación entre residentes.
El crecimiento de la vivienda vertical —particularmente en zonas como la Ciudad de México, Estado de México, Guadalajara y la Riviera Maya— ha sido clave para la expansión de estas herramientas.
“En los últimos 10 años, los desarrollos verticales se han multiplicado por cinco en estas regiones. Cuando las ciudades ya no pueden crecer hacia fuera, crecen hacia arriba. Y esto requiere una administración más profesional y ordenada”, añadió Mondaca.
A pesar de los avances tecnológicos y del crecimiento del mercado, otro de los mayores obstáculos es la ausencia de una ley unificada de propiedad en condominio a nivel nacional. Hoy en día, cada estado tiene sus propias normas, lo que dificulta estandarizar procesos y exigir mínimos de transparencia en todo el país.
“A futuro, sería muy valioso que existiera una ley transversal que establezca reglas claras para todo México. El contenido puede debatirse, pero lo fundamental es que sea una sola normativa, porque eso ordenaría mucho este rubro que sigue operando de manera muy tradicional”, apuntó el gerente de Comunidad Feliz.