Relojes, pulseras y sortijas de más de 400.000 euros: polémica en torno a la ministra francesa Rachida Dati por no declarar sus joyas
La polémica persigue a la ministra de Cultura francesa, Rachida Dati, investigada por un caso de corrupción y cuyo gusto por las joyas y la ropa cara ha sido a menudo objeto de críticas. Esta vez la controversia es precisamente a cuenta de su abultada colección de piezas de joyería de alta gama, que no incluyó en su declaración a la Alta Autoridad para la Transparencia de la Vida Pública, el organismo al que deben rendir sus cuentas los miembros del Gobierno, así como diputados, senadores y altos funcionarios.