Perú reanuda las operaciones mineras en el norte del país, afectado afectado por la violencia
El gobierno peruano dispuso la reanudación de las operaciones de las minas formales y en vías de formalización en una zona productora de oro afectada por violencia en el norte del país, dijo el ministro de Defensa, Walter Astudillo.
A inicios de mayo, el gobierno suspendió por 30 días toda la actividad minera y anunció la instalación de una base militar en el distrito de Pataz, donde secuestraron y mataron a 13 trabajadores del sector.
Astudillo sostuvo que la decisión se tomó luego de conversaciones con las mineras formales y las autoridades de Pataz, cuya actividad es clave para la economía de la zona.
“Era un clamor de la población que se realice las actividades mineras”, afirmó en una conferencia de prensa tras un Consejo de Ministros en el Palacio de Gobierno.
El ministro detalló que se reanudarán las faenas de las empresas formales y de los mineros artesanales con permisos vigente en el programa llamado REINFO, que les permite trabajar temporalmente mientras se legalizan.
Las operaciones estarán permitidas desde las 05:00 hora local hasta las 22:00 hora local, afirmó Astudillo.
Perú es el tercer mayor productor de cobre del mundo, pero los depósitos del metal rojo se encuentran en gran parte en el sur. El oro y la plata se extraen principalmente en el norte.
Astudillo dijo asimismo que el gobierno prorrogó por 60 días el estado de emergencia en Pataz, el cual permite a la fuerzas armadas asumir el control de la zona.
En Pataz opera la mina de oro Poderosa, una de las mayores del país, que ha sufrido del ataque a sus operaciones por parte de mineros ilegales, según la empresa y la policía.
Pataz se ha convertido en los últimos años en la mayor zona productora de oro de Perú debido al aporte de pequeñas minas en vías de formalización que operan bajo el amparo de permisos temporales del Gobierno.
Pero también operan minas informales o ilegales -atraídas por el aumento del precio del oro en los mercados- muchas de ellas en complicidad con bandas criminales, según la policía.