Pemex planea invertir más de 51,000 millones de pesos en electricidad al 2030
De la mano de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para el 2030 Petróleos Mexicanos (Pemex) proyecta construir una capacidad de generación eléctrica de más de 2,400 megawatts (MW), para lo cual invertiría más de 51,000 millones de pesos, dijo este viernes Víctor Rodríguez Padilla, director general de la empresa petrolera.
“Traemos alrededor de 2,400 MW que vamos a desarrollar con CFE, nuestra empresa hermana. Esos proyectos de cogeneración nos van a permitir ser mucho más eficientes”, dijo a diputadas y diputados en comparecencia con motivo de la glosa del Primer Informe de Gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
La tecnología que está en la mira de Pemex es la cogeneración eficiente, que es aquélla en la que se aprovechan los procesos térmicos para la generación eléctrica, en este caso, procesos de refinerías y plantas petroquímicas.
En una de las diapositivas de la exposición de Rodríguez Padilla, se detalló que se contempla la construcción de tres centrales de cogeneración.
La primera sería en la Refinería de Tula, con una inversión estimada de 17,357 millones de pesos, para conseguir una capacidad de hasta 794 MW. La segunda se contempla en la Refinería de Salina Cruz, con una inversión de 16,475 millones de pesos, que se traduciría en una capacidad de hasta 728 MW.
Y la tercera se ubicaría en el Complejo Petroquímico Cangrejera, con un gasto de capital de 17,439 millones de pesos y una capacidad máxima de generación de 900 MW.
De acuerdo con Pemex, el alcance general de estos proyectos sería “generar vapor y electricidad para los centros de trabajo de Pemex y colocar la electricidad excedente al Mercado Eléctrico Mayorista (MEM)”.
El anuncio de Pemex se da una semana después de que la Secretaría de Energía publicara su Plan de Desarrollo del Sector Eléctrico (Pladese), en donde se proyecta que la participación de Pemex en la generación eléctrica nacional pasará de 0.6% a 4.6% entre el 2026 y el 2030. Este impulso de Pemex le permitiría al Estado mexicano, a través de sus empresas, alcanzar una participación de 59% en la generación eléctrica nacional en el 2030, es decir, cinco puntos porcentuales más respecto del piso legal, de 54%, luego de la reforma constitucional en materia de industrias estratégicas, del 2024.
El proyecto eléctrico de Pemex forma parte de su estrategia de establecer nuevos verticales de negocio, de acuerdo con su Plan Estratégico 2025-2035, publicado en agosto pasado.
“Vamos a aprovechar las energías de la tierra, la geoenergía, esperamos hacer cogeneración de los pozos petroleros, recuperar litio de las salmueras petroleras y los proyectos que se generan aprovechando las sinergias con la industria petrolera y las nuevas tecnologías”, dijo Víctor Rodríguez.
Una de las metas de Pemex para este sexenio es diversificar sus fuentes de ingresos, para lo cual, además de su incursión en el negocio eléctrico, según su plan de negocios explorará oportunidades en otras áreas como los servicios logísticos, la producción de litio y la comercialización de otros combustibles distintos a los hidrocarburos (hidrógeno y biocombustibles).
“Pemex no es una empresa petrolera, lo fue en el pasado, ahora nos dirigimos a ser una empresa de energía y ese es el futuro de Pemex. Seguirá siendo por muchas décadas más la empresa pública del Estado”, dijo Rodríguez Padilla.
Mayores eficiencias
Entre los varios temas abordados este viernes en su comparecencia, que tomó poco más de cuatro horas, el director de Pemex afirmó que durante su primer año de administración la empresa ha reducido sus costos operativos.
“Hemos logrado ahorros significativos en la perforación, proyectando una reducción de costos de 20,000 mdp tan solo en el 2026”, dijo.
Y en su presentación electrónica reportó que el costo total de producción de hidrocarburos pasará de 31.5 dólares por barril en el 2023, su pico de la administración pasada, a 22.8 dólares proyectados en el 2025, lo que implica una reducción de 27.6 por ciento.
Al interior de dicha cifra se observa una mayor eficiencia, pero también una reducción de la carga fiscal, ya que el costo operativo y administrativo bajará de 28.3 dólares a 22.3 dólares (21.2%), mientras que el costo por derechos e impuestos pasará de 7.4 dólares por barril en el 2022 a apenas 0.5 dólares proyectados en el 2025, producto de la nueva política fiscal hacia Pemex, que contempla un solo impuesto (el Derecho Petrolero para el Bienestar), con una tasa de 30 por ciento.
