Movilidad vial sostenible: del esfuerzo individual a la responsabilidad colectiva
La normatividad ASG internacional y en México, la evaluación de este tipo de riesgos por parte de bancos y accionistas, así como un entorno ambiental y social cada vez más frágil, obligan a quienes operamos en el sector de movilidad a asumir un rol de liderazgo con visión a futuro. La sostenibilidad representa una condición para mantener la competitividad, el propósito y aumentar la resiliencia. Pero el esfuerzo individual no basta, la colaboración es fundamental.
El sector transporte genera cerca del 40% de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel global, con impactos directos en la salud pública. Frente a ello, varias empresas del sector han trazado objetivos de mitigación, entre otros relacionados con la agenda ASG. No obstante, actuar de forma aislada limita el impacto; al coordinar esfuerzos, multiplicamos resultados y compartimos una misma meta.
Desde una de las operadoras de infraestructura de transporte con mayor afluencia vehicular, en 2018 iniciamos el desarrollo de nuestra estrategia ASG bajo una dirección general de sostenibilidad. Hoy, su implementación nos posiciona como referente en el sector carretero. Así, descubrimos la oportunidad de reunir a quienes usamos la infraestructura vial para impulsar una transformación conjunta.
Este enfoque nos llevó a aliarnos con el Centro para el Futuro de las Ciudades del Tecnológico de Monterrey para que, con su respaldo académico, reuniéramos al sector privado, a la sociedad civil, al sector público y a organismos internacionales, y trazáramos una hoja de ruta ASG para el sector de la movilidad. Esta iniciativa permitió identificar buenas prácticas, riesgos, oportunidades y ejemplos concretos que facilitan la adopción de estos criterios.
El resultado de este trabajo es una plataforma digital que permite a cualquier empresa u organización que utiliza la infraestructura vial para sus operaciones, realizar un autodiagnóstico que evalúa su nivel de madurez en los aspectos ambiental, social y de gobernanza. También, se ofrece una guía práctica para fortalecer sus capacidades.
La plataforma es de libre acceso, por lo que las grandes empresas empoderarán a su cadena de valor y habrá un efecto multiplicador. Permite compartir aprendizajes y facilita la implementación de acciones ASG con el fin de mejorar la gestión y promover instituciones más sostenibles en el tiempo.
El liderazgo se demuestra al abrir camino y también al invitar a otros a recorrerlo. Las empresas cuyos niveles de sostenibilidad son más avanzados, pueden sumar a sus grupos de interés. El cambio real ocurre cuando se comparte el conocimiento y se extienden las soluciones.
Aleatica y el Centro para el Futuro de las Ciudades brindan esta herramienta para el sector de la infraestructura vial. Les invito a usarla para construir un ecosistema colaborativo. Esa es la ruta para lograr un impacto duradero, escalable y posible, empezando con quienes están listos para liderar.