México y el futuro de su comercio con Estados Unidos
Sobra decir que los flujos comerciales de los próximos años van a cambiar de manera importante, por las nuevas políticas comerciales de Estados Unidos, pero también las de otros países y regiones. Es muy probable que, después de la turbulencia actual, México resulte ganador del proceso.
De acuerdo con datos preliminares, en el escenario de mayores tarifas para los países de Asia, México tendrá espacio para incrementar de manera importante sus exportaciones a Norteamérica de computadoras, pantallas de video, equipo de audio y video, el de comunicaciones, lámparas, material eléctrico, electrónicos, electrodomésticos, equipo de oficina y aires acondicionados. Se trata de productos en los que México ya cuenta con capacidades para exportar, pero que requiere de nuevas inversiones y el desarrollo de proveedores para poder atender la nueva demanda de exportación que se va a generar. Es también una oportunidad para incrementar el contenido y el consumo nacional de esos productos manufacturados en el país.
Otros sectores, como el de maquinaria, teléfonos, o el de videojuegos, tienen también potencial de crecimiento exportador, pero definitivamente, debido a la complejidad de esa actividad, se requiere de un trabajo más intenso para construir la infraestructura, la tecnología y las capacidades necesarias para hacerlos detonar. En ese ámbito, los datos muestran también un gran potencial exportador, ante las nuevas circunstancias comerciales, de dispositivos, instrumentos médicos y aparatos ortopédicos, ya que contamos ya con un sólido medio ambiente para su producción, pero que definitivamente requiere de mayor proveeduría local para desarrollarse.
Además, independiente de lo que suceda con la industria automotriz, que seguirá exportando, la oportunidad ahora es muy buena en productos como las baterías eléctricas, equipos de transmisión, las válvulas y los motores eléctricos. México podría eventualmente participar en procesos como el de chips automotrices y el desarrollo de software para autos.
México seguirá siendo un importante país exportador, a Norteamérica y al resto del mundo. Nuestra posición geográfica y la capacidad e infraestructura que hemos construido para la manufactura nos va a permitir salir bien librados de las nuevas circunstancias y permitir que continúe el fenómeno de la relocalización. Eso va a requerir también explorar nuevos productos, destinos comerciales e incrementar el contenido nacional de los insumos. Lo último para aprovechar mejor nuestra capacidad exportadora como motor de crecimiento, pero también como una necesidad estratégica ante las nuevas circunstancias.