Los enviados de EE UU Kushner y Witkoff llegan a Israel para salvaguardar el alto el fuego en Gaza
Gaza vela este lunes los muertos de la oleada de bombardeos lanzada en la víspera por Israel, a raíz de una emboscada —por milicianos escondidos bajo un túnel— en la que perdió dos soldados. Los ataques israelíes por tierra y aire duraron nueve horas, mató al menos a 28 palestinos e hizo temer por la continuidad del alto el fuego. Poco después, el padre del acuerdo del alto el fuego, el presidente de EE UU, Donald Trump, dio credibilidad a la versión de Hamás (que no había organizado la emboscada, en el área de la Franja bajo control israelí) y reafirmó la vigencia del alto el fuego. El Gobierno de Benjamín Netanyahu —que lo vulnera a diario y ha matado ya casi a cien palestinos desde que entró en vigor el cese de hostilidades, el pasado día 10— lo trató como un primer test para marcar cuanto antes las reglas del juego.