La protesta de los jóvenes de Marruecos sale de nuevo a la calle desgastada por la represión
Los jóvenes del grupo GenZ 212 que desde hace un mes se han movilizado en Marruecos para reclamar mejores servicios de sanidad y educación y en contra de la corrupción, se han echado a la calle este fin de semana a pesar de la represión, que ha debilitado sus protestas. En la noche del sábado apenas se concentraron unas pocas decenas de manifestantes ante la sede del Parlamento en Rabat. Más de 1.500 personas están siendo procesadas por su participación en las marchas, que en ocasiones desembocaron en violentos disturbios. Tres jóvenes perdieron la vida por disparos policiales a comienzos de mes en la región de Agadir (sur) y decenas resultaron heridos. La Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) ha documentado que más de 240 manifestantes del movimiento de la generación Z han sido ya condenados a “duras penas”, que en 39 casos han oscilado entre los 15 y los seis años de cárcel. El informe presentado el viernes en Rabat por la AMDH, ONG de izquierda que ejerce como conciencia crítica del país magrebí, precisa que 330 de los encausados son menores de edad.
