La Cultura de la Paz, Transformaciones Regresivas
“El único orden en el universo es sólo un ciclo que va de la calma al caos y viceversa.” Toba Beta
El arribo de Morena al poder significó un desvío profundo en la ruta orientada hacia el desarrollo de México, diseñada e implementada durante décadas con la participación plural de las fuerzas políticas. Un ejemplo claro de este viraje es la desconfiguración del Estado de Derecho, que debería ser garantía de libertad, no una herramienta del régimen para restringirla. A ello se suma la decadencia de la democracia, la desaparición de la pluralidad, el desmantelamiento del control constitucional, del federalismo y de la división de poderes, entre otros pilares institucionales.
Algunos programas y proyectos que apuntaban a consolidar un estadio superior de desarrollo para todos fueron transformados en acciones oficialistas con fines electorales, acompañadas de un derroche opaco de recursos públicos y un alarmante incremento de la deuda nacional.
1. Aeropuerto. La cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco se produjo cuando la obra llevaba un avance del 21%, el cual fue desmantelado. Se desperdiciaron cientos de millones de pesos, que aún seguimos pagando. El NAIM estaba concebido como uno de los aeropuertos más modernos y funcionales del mundo, con un esquema de autofinanciamiento mediante bonos respaldados por la Tarifa de Uso de Aeropuerto (TUA), que sería cubierta exclusivamente por sus usuarios.
En su lugar, se optó por modificar la base aérea militar de Santa Lucía para construir el AIFA, una obra que todos pagamos, la usemos o no. Según cifras oficiales, su costo ascendió a 75 mil millones de pesos y es subutilizado, mientras el Aeropuerto Benito Juárez se deteriora aceleradamente.
2. Combate a la pobreza. En 1997 se implantó el PROGRESA, posteriormente denominado Oportunidades y luego PROSPERA, con el objetivo de reducir la pobreza extrema mediante intervenciones focalizadas en educación, salud y alimentación. El programa otorgaba apoyos económicos y en especie, condicionados a la asistencia escolar y a consultas médicas. Llegó a beneficiar a más de 6 millones de familias en todo el país, es decir a alrededor de 30 millones de personas.
Este modelo fue sustituido por los Programas para el Bienestar, que entregan dinero bajo una lógica de derecho universal, sin condiciones para recibir ni conservar el beneficio. Por ejemplo, la Beca Rita Zetina, dirigida a estudiantes de preescolar, primaria y secundaria en escuelas públicas, no exige comprobación de asistencia ni rendimiento académico, y excluye a quienes estudian en instituciones privadas.
Las Pensiones del Bienestar carecen de objetivos estructurales para modificar patrones de pobreza, al no estar acompañadas de políticas complementarias en educación, salud o capacitación laboral. Estos programas han sido señalados como instrumentos clientelares, financiados mediante endeudamiento público, sin considerar que la productividad no se alcanza repartiendo dádivas.
3. Salud. El Seguro Popular, creado en 2004, fue un programa voluntario, al que podían acceder personas sin seguridad social, ofrecía protección financiera y consultas médicas, atención obstétrica, estudios de laboratorio y gabinete, acciones preventivas, medicina ambulatoria, odontología y aseguraba la disponibilidad de medicamentos asociados a las intervenciones cubiertas. Su financiamiento combinaba recursos federales y aportaciones familiares proporcionales al ingreso. Llegó a contar con más de 50 millones de afiliados.
En 2020 fue sustituido por el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI), con el propósito de ofrecer servicios gratuitos y combatir una supuesta corrupción. Sin embargo, el INSABI fracasó rotundamente, en gran parte por la deficiente gestión de medicamentos. Fue reemplazado por IMSS-Bienestar, que aún no opera en todo el país, dejando vacíos críticos en la atención médica.
4. Contexto actual. México enfrenta hoy grandes retos por resolver, como una creciente violencia, polarización política, débil generación de empleo, altos niveles de corrupción, desabasto de medicamentos y una deficiente aplicación de vacunas, entre otros.
5. Llamado a la República. Es indispensable asumir que el ejercicio legítimo del poder y el progreso verdadero se sustentan en la verdad, el respeto, la concordia y una auténtica cultura de la paz. Sólo así podremos retomar el camino que permita generar prosperidad y desarrollo, en un marco de justicia, institucionalidad y dignidad para todos.
* El autor es abogado, negociador y mediador.
X: @Phmergoldd