La ciberseguridad OT como componente estratégico en los sistemas industriales
Con el paso de los años, la ciberseguridad en los sistemas de tecnologías operativas o de la operación —Operational Technology cybersecurity (OT, por sus siglas en inglés)— ha dejado de ser una opción convirtiéndose en un componente esencial tanto para la continuidad operativa, como para la seguridad de los empleados y la resiliencia del negocio. Cada día, las infraestructuras críticas y los entornos industriales se conectan más y dependiendo en gran media de la tecnología; sin embargo, las amenazas cibernéticas también han evolucionado, siendo más sofisticadas y perjudiciales. Uno de los impactos más inmediatos y perjudiciales de un ciberataque en sistemas OT es la interrupción de la producción. Este tipo de sistemas controla procesos industriales esenciales y, cuando son comprometidos, pueden detener operaciones completas. Esto no solo resulta en pérdidas económicas directas debido a la interrupción de la producción, sino que también puede afectar la cadena de suministro, retrasar entregas y generar costos adicionales en términos de tiempo y recursos necesarios para restablecer las operaciones. En industrias donde el tiempo de inactividad se mide en dólares, las pérdidas pueden ser desmesuradas.
A medida que las redes OT se integran más con las tecnologías de la información y se conectan al internet, aumentan las superficies de ataque, exponiendo estos sistemas a riesgos cibernéticos. La convergencia de TI (Tecnología de Información) y OT (Tecnología operativa), es una tendencia significativa que está moldeando el campo de la ciberseguridad, históricamente, ambos entornos actuaban de manera aislada. Ahora bien, su integración está aumentando debido a los beneficios operativos y económicos que ofrece, como la optimización de procesos y la mejora en la toma de decisiones. No obstante, esta convergencia también introduce nuevas vulnerabilidades, ya que los sistemas OT están ahora expuestos a amenazas que antes eran exclusivas del ámbito TI.
La persistencia de equipos heredados sin actualizaciones representa una serie de riesgos significativos para las infraestructuras industriales. Muchos sistemas o dispositivos antiguos no reciben actualizaciones (conocidas como parches) de seguridad y esto los convierte en blancos vulnerables para los atacantes. La falta de actualizaciones incrementa la exposición a vulnerabilidades, permitiendo que los ciberdelincuentes accedan a redes y a sistemas críticos.
Asimismo, la creciente conectividad remota representa otra amenaza para la ciberseguridad en OT, con el auge del teletrabajo y la gestión remota de infraestructuras, las conexiones no seguras y las credenciales de acceso comprometidas pueden abrir la puerta a accesos no autorizados. La falta de controles estrictos en estos accesos puede derivar en la manipulación de sistemas críticos y en la interrupción de operaciones esenciales. Por su parte, el ransomware continúa siendo una de las amenazas más serias en los entornos industriales, ya que este tipo de ataque puede paralizar por completo las operaciones, impactar la producción y generar pérdidas económicas significativas.
La ciberseguridad OT es un componente estratégico que no puede abordarse de manera aislada, sino que requiere la colaboración estrecha entre áreas clave como tecnología, operaciones, ingeniería y cumplimiento, así como el apoyo de la alta dirección. Integrar la seguridad en la planificación empresarial, además de fortalecer la resiliencia operativa, alinea también las medidas de protección con los objetivos generales del negocio.
Es imperativo implementar prácticas robustas como el monitoreo continuo, la segmentación de redes, la gestión de parches y la capacitación continua; adoptar un enfoque proactivo basado en la detección y respuesta temprana para mitigar riesgos antes de que se conviertan en incidentes. La ciberseguridad en entornos OT requiere una estrategia integral; contar con la misma es esencial para fortalecer controles, y mitigar riesgos.