Inseguridad, detrás de resistencia de inflación
Problemas de seguridad, de transporte y poca competencia podrían estar dificultando el trabajo de Banco de México (Banxico) para llevar la inflación al objetivo, reconoció el subgobernador Jonathan Heath.
Consideró que “la tenue tendencia a la baja de la inflación subyacente”, particularmente en el componente de servicios, “parece no estar respondiendo a las condiciones cíclicas de la economía”.
Esto podría evidenciar que “hay factores más estructurales detrás de la resistencia a la baja que han presentado los precios de servicios”.
“Podrían estar en juego muchos factores estructurales como problemas de seguridad, de transporte, poca competencia en muchos sectores porque hay empresas que tienen mucho poder de mercado y este tipo de cosas dificultan mucho nuestro trabajo”, reconoció al participar en la conferencia del Informe Trimestral, correspondiente al periodo enero a marzo del año 2025.
El subgobernador admitió que a él le preocupa que la inflación se encuentre fuera de rango, en la primera quincena de mayo llegó a 4.22 por ciento.
“Nosotros queremos que converja al objetivo de 3% y últimamente vemos que va en la dirección contraria y esto obedece a dos factores. Uno, el aumento de la no subyacente (…) que tiene como parte de una de sus características su volatilidad (…) sus precios no son susceptibles a la política monetaria (…); y la otra parte que le preocupa es “la tenue tendencia a la baja que han mostrado los precios de servicios”.
Resistencia en subyacente
El banquero central resaltó que la inflación subyacente había bajado sistemáticamente tras el choque mundial de inflación que la llevó a su pico en septiembre del 2022, cuando registró una variación de 8.71 por ciento.
Luego describió la trayectoria a la baja que se observó en el indicador de precios de servicios, que llegaron al punto máximo de 5.71% en marzo del 2023 y que tardaron 17 meses para bajar de una variación de 5% anual, lo que sucedió en octubre del 2024.
Desde su perspectiva los precios de servicios no han logrado contrarrestar la presión de las de mercancías que en cambio han tenido un rebote en mercancías alimenticias y no alimenticias.
Explicó que los servicios suelen ser muy sensibles a la posición cíclica de la economía y aún están esperando que puedan responder.