Industria farmacéutica mexicana en desventaja ante extranjeras subsidiadas: Amelaf

La Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos (Amelaf) pidió reglas claras al Gobierno federal para evitar la competencia desleal de extranjeros, principalmente de India, que venden medicamentos subsidiados a precios difíciles de igualar e incluso por debajo al costo de las materias primas, lo cual pone en desventaja a los fabricantes nacionales.
“Lo que pedimos es que no le den entrada a los laboratorios que vienen de otros países que tienen subsidios porque ahí hay una competencia desleal”, manifestó el presidente de la Amelaf, Juan de Villafranca.
Explicó que el 90% de los Ingredientes Farmacéuticos Activos (API) que usa la industria farmacéutica nacional se importa, principalmente, de India y China.
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“Lo que queremos es que haya piso parejo y que, en un momento dado, no haya beneficios a los extranjeros y se destaque la importancia que tiene la industria farmacéutica mexicana”, dijo.
Aunque consideró “positivo” el requisito de que las empresas extranjeras de la industria farmacéutica establezcan plantas en México, alertó: “No nos vayan a ‘vender espejitos’ de poner un almacén y que vengan productos de otros países, hablo concretamente de la India, que tienen totalmente subsidios, donde no podemos competir”.
“Una planta que fabrica medicamentos y tenga el Certificado de Buenas Prácticas de Fabricación (GMP), aprobado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), es una inversión sólida. Nos preocupó cuando mencionaron que los almacenes se consideraban inversión”, abundó.
El presidente de la Amelaf expresó lo anterior luego de que, el pasado 29 de mayo, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció un decreto para atraer inversiones de farmacéuticas internacionales para que produzcan medicamentos e insumos médicos en México a partir de 2026. El objetivo es posicionar al país como un líder en la industria farmacéutica.
Se esperaba que el decreto, con los detalles técnicos, se publicara en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el viernes pasado.
Juan de Villafranca explicó que todavía falta conocer los términos del decreto, sobre todo, la regla de puntaje respecto a si se va a considerar una inversión la construcción de una planta productiva al igual que un almacén y la etapa final de acondicionamiento (terminación) del producto.
Lo anterior sería una desventaja para la industria nacional, reiteró, porque las empresas extranjeras traen a México el producto ya fabricado, sin enfrentar las mismas reglas laborales ni los mismos impuestos.
Además, empresas de la industria de India y China cuentan con el apoyo y subsidios de sus gobiernos, lo que les da ventajas competitivas.
Por ello, reiteró la necesidad de garantizar “piso parejo” para los productores mexicanos, ya que reveló que en la reciente subasta de la compra consolidada del sector salud para el periodo 2025-2026, laboratorios de la India presentaron ofertas con precios por debajo incluso de la materia prima.
Lo anterior dejó fuera de competencia a laboratorios mexicanos que no pudieron igualar dichos precios.
Lo más preocupante, subrayó Juan de Villafranca, es que algunas de estas farmacéuticas pertenecen a grupos empresariales que producen el API (sustancia activa de los medicamentos) y lo venden a sus propios laboratorios a precios más bajos que a los mexicanos.
“Esto es un riesgo. Entonces, lo que queremos es que haya ‘piso parejo’ y, que en un momento dado, no haya beneficios a los extranjeros y que se destaque la importancia que tiene la industria farmacéutica mexicana”, enfatizó.
Para apoyar a la industria farmacéutica nacional, la Amelaf aboga porque se respete el 15% de preferencia para empresas con producción local, como establece la Ley de Adquisiciones y Obra Pública, y que se asignen puntos de calificación en las licitaciones a quienes operen plantas en el país.
Si no se cuida este aspecto con el decreto anunciado el pasado jueves “por ahí se nos van a colar los de Brasil, India y China”, alertó el presidente de la Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos.
Recordó que el decreto, aún pendiente de publicación en el DOF, está relacionado con la compra consolidada de medicamentos e insumos médicos a partir de 2026, destinada al abasto de instituciones de salud pública como el IMSS, ISSSTE e IMSS-Bienestar.
Este contempla criterios de evaluación que otorgarán mayores puntos a los que participen en las licitaciones, adquisiciones e invitaciones, que cuenten con plantas de producción en México.
Sobre ello, existe preocupación en caso de que queden medicamentos sin adjudicar durante las licitaciones, ya que podría optarse por adquirir productos en el extranjero, incluso si las empresas proveedoras no cuentan con plantas en México.
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Juan de Villafranca resaltó que el anuncio, presentado en la conferencia matutina del jueves, se centró en atraer inversión extranjera, pero dejó de lado el apoyo a las empresas mexicanas, responsables del 80% de los medicamentos consumidos en México, con 80 plantas que generan empleos y usan insumos nacionales, como empaques y servicios de mantenimiento.
“Nos hubiera gustado que hubieran mencionado más a la industria farmacéutica mexicana, se mencionó poco, hablaron de atraer inversiones de otros lados, no hablaron tanto de fortalecer a la industria nacional, no se habló de crecimiento y reinversiones de la empresa mexicana”, lamentó.
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