Huir de Ciudad de Gaza aunque haya que dormir en la playa o en la carretera: “Morirán bajo los bombardeos israelíes si no logran salir”

Mohammed al Dahdouh descarga las pertenencias de su familia, de 15 miembros, desde la parte trasera de un camión en la arena de la playa de Jan Yunis. Con movimientos bruscos, este barbero palestino de 38 años y padre de cinco niños lanza colchones, mantas, bolsas de ropa y enseres domésticos al suelo, en un gesto que refleja más rabia que cuidado hacia unas posesiones que representan los restos de su vida anterior en el barrio de Tel al Hawa, en Ciudad de Gaza. “Dios nos basta”, repite una y otra vez, con una voz que resuena en la playa, donde otros miles de familias desplazadas intentan levantar refugios improvisados tras no haber conseguido ni siquiera un pequeño terreno para instalar su tienda. “Por favor, cálmate. Por los niños, te necesitan”, le suplica su esposa, Mariam, de 35 años, que se sienta en la arena y abraza a su hija menor, Mais, de seis.