¿Cómo reinventar la empresa familiar sin perder la esencia?

Cuando una empresa familiar está en proceso de sucesión, uno de los problemas más frecuentes entre los familiares es confundir la innovación con el reemplazo de la esencia, en el que los fundadores se resisten a ideas nuevas y provoca una desventaja competitiva.
De acuerdo con la Asociación de Emprendedores en México (Asem), en el país, 57% de las empresas son familiares, por lo que es relevante crear pilares que construyan la identidad empresarial y poder mantenerse de generación en generación.
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La esencia se compone por valores, visión, legado y todo lo que el fundador hizo en algún momento junto con la familia”, expresa Iván Quintero, director asociado en México en el Instituto Latinoamericano Empodérate Líder.
Empresas familiares se pueden quedar atrás
Desarrollar una empresa causa un apego emocional, por los años de trabajo, pero cuando los integrantes más jóvenes proponen ideas, los fundadores pueden tomarlo como una amenaza al patrimonio y, por ende, se crean los conflictos.
Esto provoca que haya una pausa en el desarrollo de la empresa e incluso los candidatos a sucesores se pueden sentir excluidos y opten por tomar caminos diferentes, por lo que la sucesión se vuelve complicada, de acuerdo con José Fainsod, presidente del Instituto de la Empresa Familiar Latinoamericana (IEFL).
En México, el 89% de las empresas familiares se encuentra en la primera generación y solo 8% está en la segunda, de acuerdo con la Asem. Por lo que muchas de ellas pueden crear una base sólida para construir la esencia empresarial y mantenerse vigente con el tiempo.
“Para evitar el riesgo de afectación de la esencia de la empresa familiar, lo primero es establecer una cultura de mejora continua y que cada generación mejore el legado”, argumenta Iván Quintero.
La armonía entre generaciones
La disputa sobre qué es mejor para la empresa suele crear conflictos que escalan a lo personal, debido a que las generaciones mayores no comprenden las ideas de los más jóvenes y viceversa, lo que se vuelve un círculo vicioso.
Las ideas del fundador hacen que las cosas sigan funcionando, como en el pasado lo hicieron, pero todos los días hay cambios y hay que ajustarse a ellos, no solo desde la perspectiva tecnológica”, puntualiza José Fainsod.
Sin embargo, los especialistas hacen énfasis en que no se trata de excluir a los fundadores o generaciones más grandes, sino hacerlos parte del cambio, ya que con su experiencia complementan la innovación.
Por ende, se aconseja crear comités o laboratorios de innovación para encontrar tendencias en el mercado, como el uso de la tecnología, la Inteligencia Artificial (IA).
“La IA es una herramienta que puede crear un balance entre lo que es la tradición y la modernidad. Aplicas la innovación para que puedas identificar elementos que son inamovibles de la empresa”, menciona Iván Quintero.
Aunado a que, un factor que comparten las empresas familiares que se han mantenido a lo largo de los años, es la visión a futuro, es decir, estar abierto a nuevas ideas e involucrar a los futuros sucesores desde temprana edad.