Cómo evitar que el arroz se bata: 5 errores comunes y cómo solucionarlos

Cocer arroz es uno de esos actos cotidianos que todos creen dominar… hasta que el resultado no convence: granos pegajosos, masas compactas o arroz sin cocer por dentro. Aunque parece un ingrediente básico, la técnica importa, y pequeños errores hacen la diferencia entre un arroz perfecto y uno batido. Aquí te presentamos los errores más comunes al cocinar arroz blanco y, lo más importante, cómo evitarlos o corregirlos.
1. No enjuagar el arroz
Por qué es un error: El arroz crudo viene recubierto de almidón. Si no se enjuaga, ese almidón extra se libera al cocerse y genera una textura pastosa.
Solución: Enjuaga el arroz crudo bajo el chorro de agua fría hasta que el agua salga clara. Eso puede requerir entre 3 y 5 lavadas. No hace falta remojarlo por horas; solo lavarlo bien justo antes de usarlo.
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2. Agregar demasiada agua (o muy poca)
Por qué es un error: Una mala proporción entre agua y arroz desequilibra todo: demasiada agua lo convierte en masa; poca, lo deja crudo o lo quema.
Solución: Usa una medida confiable. Para arroz blanco de grano largo, lo ideal es 1 taza de arroz por 1.75 tazas de agua. Si usas arroz integral, la proporción sube a 1 taza de arroz por 2.25 tazas de agua.
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arroz, perfecta cocción
3. Mover el arroz mientras se cuece
Por qué es un error: Revolver durante la cocción activa el almidón y rompe los granos, generando una textura gomosa y apelmazada.
Solución: Una vez que agregues el arroz al agua caliente, mezcla solo una vez al inicio. Después, tápalo y olvídalo. Cocinar arroz requiere dejarlo tranquilo.
4. Levantar la tapa antes de tiempo
Por qué es un error: Levantar la tapa libera vapor, interrumpe la cocción y provoca una cocción dispareja.
Solución: Tapa bien la olla, baja el fuego al mínimo una vez que empiece a hervir y respeta el tiempo: entre 15 y 18 minutos para arroz blanco. Usa tapa de vidrio si necesitas ver sin abrir.
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Arroz perfectamente cocido.
5. No dejarlo reposar después de cocerlo
Por qué es un error: Al quitarlo del fuego y servirlo de inmediato, no permites que el vapor termine de suavizar los granos y que el exceso de humedad se distribuya.
Solución: Cuando termine el tiempo de cocción, apaga el fuego y déjalo reposar tapado 5 a 10 minutos. Después, esponja el arroz suavemente con un tenedor, nunca con cuchara.
Extra tip: ¿y si ya se batió? Si ya se pasó de cocción, extiéndelo sobre una charola para enfriar rápido, separa lo que puedas con tenedor y úsalo para hacer arroz frito, croquetas o como base para sopas. No lo tires: hay formas de rescatarlo.
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