Actividad económica cayó 0.2% anual entre julio y septiembre

La economía mexicana experimentó una contracción de 0.19% anual en el tercer trimestre del año, con cifras ajustadas por estacionalidad de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Esta caída fue menos pronunciada que el de la estimación oportuna de hace 20 días de -0.30 por ciento.

El declive en la actividad económica del periodo julio a septiembre estuvo dirigido por la contracción del sector industrial que también en el comparativo anual tuvo un desempeño negativo en 2.7 por ciento.

Bajada que no pudieron compensar con su desempeño positivo y en conjunto las actividades primarias, que integran a la agricultura, pesca y ganadería; ni las terciarias, del comercio y servicios.

Para ponderar el desempeño negativo del Producto Interno Bruto (PIB) respecto del observado en el mismo periodo del año pasado, basta observar que resultó la primera contracción en presentarse desde el cuarto trimestre del año 2021, cuando registró una caída de 0.9% anual.

Tal como lo explicó el economista jefe de Finamex, Casa de Bolsa, Víctor Gómez Ayala, el dato negativo del PIB anual, ayuda a poner en perspectiva el contexto de la actividad económica.

“En el trimestre de julio a septiembre del 2024, contra el que estamos comparando, estuvo marcado por la elección presidencial y alcanzó a captar la aprobación de la reforma judicial. Un trimestre que pese al ruido político fue relativamente bueno y mucho más robusto en lo económico de lo que observamos en el mismo trimestre de este año”, comentó.

La caída del PIB anual al tercer trimestre, interrumpió la racha de 17 trimestres en números positivos y confirma un debilitamiento consistente desde el primer cuarto del 2023.

El CEO y fundador de Valerio Consulting Group, Alejandro Valerio, consignó que el pesimismo del sector empresarial se ha profundizado desde que se aprobaron las reformas constitucionales.

Con una caída de 2.7% anual en las actividades secundarias, se hilaron seis trimestres en caída desde el último trimestre del 2024.

Las manufacturas perdieron impulso afectadas por la debilidad de la demanda externa aunque su desempeño se mantiene más estable en comparación con la minería y la construcción.

Las actividades terciarias experimentaron un avance de 1% anual. Gómez Ayala comentó que año pasado, el mercado interno aún tenía cierto dinamismo y capacidad para contribuir a la actividad nacional.

La directora de análisis económico y financiero de Banco Base, Gabriela Siller, explicó que buena parte de este estancamiento resulta de la debilidad de determinantes como un mercado laboral que está creando empleos muy por debajo del ritmo observado en los años previos.

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