Ropa y calzado deportivo en el blanco de los aranceles

La ropa deportiva que acompaña a los atletas en competencia y la que puede vestir a cualquier persona en el mundo es parte de la guerra comercial emprendida por Donald Trump.
Trump dice que quiere “devolver la riqueza a Estados Unidos” y para ello, detalló una lista de países que considera que tienen malas prácticas comerciales. Aseguró que no les cobrará la tasa recíproca completa, sino que se trata de un “arancel recíproco amable”, es decir, “les cobraremos aproximadamente la mitad de lo que nos cobran”.
La última vez que Trump impuso aranceles a las importaciones procedentes de China, gran parte del sector minorista respondió reestructurando las cadenas de suministro y trasladando las operaciones de fabricación de China a otros países. Vietnam fue el mayor beneficiario de este cambio. Ahora, las cosas cambiaron de sentido.
Con un arancel del 46% Vietnam es uno de los países más afectados de la lista. Actualmente, allí se fabrican todo tipo de productos, incluyendo muebles, hardware tecnológico, la ropa y el calzado deportivo. El 99% de todo el calzado vendido en Estados Unidos es importado y el 50% del calzado de Nike se fabrica en Vietnam. El país produce una cantidad significativa de calzado para toda la industria, incluyendo Adidas, On, Reebok, Deckers (que incluye Hoka, Ugg y Teva) y Brooks.
Otros países sujetos a aranceles incluyen Indonesia, Camboya, Taiwán, Corea del Sur y otros. Con 123,500 millones de dólares, el déficit comercial de Estados Unidos con Vietnam es el tercero más grande, solo superado por China y México, según declaró el analista de Morningstar, David Swartz, a Front Office Sports.
“Vietnam ha reemplazado en gran medida a China como el principal país proveedor de calzado deportivo. No creo que ni siquiera multinacionales como Nike puedan evitar por completo los aranceles sobre las importaciones procedentes de ese país. Las empresas pagan los aranceles y lo hacen posible cuando trasladan el coste adicional a los consumidores (en la medida de lo posible). Sin embargo, los aranceles podrían perjudicar económicamente a Vietnam y a otros países, ya que empresas como Nike podrían trasladar su producción a otros lugares para evitar pagarlos, si es posible”, afirma Swartz.
Nike comenzó a fabricar en Vietnam en 1995, siendo uno de los primeros inversores extranjeros en la economía del país. Las importaciones vietnamitas aumentaron a 136,600 millones en 2024, 19% más que en 2023, según la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos.
Además del arancel de 46% se suma el del 20% para el calzado deportivo con parte superior textil, según la Asociación Estadounidense de Ropa y Calzado. Para Nike, esto se traduce en un costo adicional de 8.28 dólares por par, o casi 66,000 dólares más por contenedor de envío estándar, cada uno con capacidad para unos 8,000 pares.