Putin afianza su influencia en los Balcanes tras la victoria electoral de un prorruso en Bosnia-Herzegovina
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, juega estos días una partida decisiva en Ucrania. Pero, mientras tanto, no pierde terreno en el corazón de los Balcanes. Su gran aliado en Bosnia-Herzegovina, Milorad Dodik, expresidente de la República Srpska y líder de la Alianza de Socialdemócratas Independientes (SNSD, por sus siglas en inglés), ha conseguido que su delfín, Sinisa Karan, venza en las elecciones celebradas este domingo en la República Srpska (de mayoría serbia), una de las dos entidades del país, junto a la Federación de Bosnia y Herzegovina, de mayoría bosniaca (bosnia musulmana) y croata. Los comicios se celebraron tras la inhabilitación de Dodik por las autoridades electorales el pasado agosto.
