Día Mundial del Ahorro: solo 66% de los mexicanos tiene un “guardadito” y la mayoría lo tiene en casa
Cada 31 de octubre se conmemora el Día Mundial del Ahorro, una fecha impulsada desde 1924 para fomentar el hábito de guardar dinero y promover la educación financiera.
En México, sin embargo, los datos muestran que el reto sigue siendo grande: solo 66% de la población adulta tiene algún tipo de ahorro, según la más reciente Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) retomada por la Condusef en un artículo publicado en la Revista proteja su dinero.
La mitad de los mexicanos aún ahorra de forma informal
Aunque el número de personas que dicen ahorrar ha aumentado con respecto a 2012, cuando solo lo hacía 50.8%, la mayoría sigue utilizando mecanismos informales, es decir, fuera del sistema financiero.
Según la Revista de la Condusef, 41% de los mexicanos guarda dinero en casa, mientras que otros recurren a tandas (20%), cajas de trabajo o de conocidos (13%) o incluso familiares y amigos (9%) para resguardar su dinero.
Solo una parte menor utiliza medios formales: 17% ahorra mediante cuentas o cheques, 13% a través de nómina y apenas 3% invierte o deposita a plazo.
¿Para qué se ahorra en México?
El uso del ahorro también refleja una mezcla de urgencias y metas personales:
En el ahorro informal, 37% lo destina a gastos personales y 32% para emergencias.
En el ahorro formal, las emergencias ocupan el primer lugar (41%), seguidas por gastos personales (30%) y mejoras en vivienda (22%).
Solo 13% de los mexicanos ahorra para educación, tanto en esquemas formales como informales.
Estos datos muestran que, aunque existe conciencia sobre la necesidad de prevenir imprevistos, el ahorro a largo plazo y con objetivos de inversión sigue siendo una práctica minoritaria.
Obstáculos para ahorrar: bajos ingresos y desconfianza
Entre los principales retos que enfrentan los mexicanos para ahorrar destacan:
- Ingresos insuficientes que limitan la posibilidad de apartar dinero.
- Gastos imprevistos que obligan a usar el ahorro antes de tiempo.
- Desconfianza en los bancos o desconocimiento de productos financieros.
- Falta de educación financiera, que impide aprovechar rendimientos o beneficios fiscales del ahorro formal.
“Primero ahorra, luego gasta”: pasos básicos para empezar
La Condusef propone una guía práctica para quienes buscan comenzar a generar su “guardadito”:
- Separa una cantidad fija cada vez que recibas dinero, aunque sean 10 o 50 pesos.
- Gástalo en ti, trátalo como un pago obligatorio.
- Hazlo una rutina hasta que se vuelva automático.
- Elige dónde guardarlo, desde una cuenta básica o de nómina, hasta fondos de inversión o planes de ahorro.
- Deja que crezca, aprovechando el interés compuesto o instrumentos que generen rendimientos.
Fomentar el ahorro no solo fortalece las finanzas personales, sino también la economía del país. Más personas ahorrando en el sistema formal significan mayor inversión interna, menor dependencia del crédito informal y mayor resiliencia ante crisis económicas.



