Autoconsumo inteligente, el nuevo esquema para la generación distribuida de electricidad
Durante más de una década, el trato para quienes tenían paneles solares en México fue: si te sobraba energía durante el día, la “guardabas” en la red de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y por la noche la “retirabas” de tu recibo. Era un trueque energético 1 a 1 que permitió que la generación distribuida —la energía solar producida directamente por hogares, comercios e industrias— se multiplicara en todo el país.
Ese trato se acabó. Con el nuevo marco regulatorio, ese intercambio deja de ser uno a uno. Ahora, la energía solar extra que se inyecta a la red se paga a un precio, y la energía que se consume de noche se cobra a otro, generalmente más caro.
Te puede interesar
-

Empresas
La CFE logra utilidad neta de 56,416 millones de pesos en el tercer trimestre de 2025

Empresas
IP demanda certeza jurídica en energía
Para la mayoría de las industrias —que usan casi toda la energía que producen—, el impacto será mínimo. Pero el cambio obliga a todo el sector a evolucionar.
El mercado que debe adaptarse es masivo. Hoy, México cuenta con 4,326 MW de capacidad solar instalada en techos de casas y negocios. Traducido a la vida real, eso es suficiente para abastecer el consumo eléctrico anual de más de 5 millones de hogares, o el equivalente a toda la demanda residencial de Nuevo León y Querétaro juntos.
De vender energía a usarla
El fin del trueque 1 a 1 mata el incentivo de vender la energía sobrante. La nueva rentabilidad no está en generar más, sino en usar más de la energía propia. Aquí nace el autoconsumo inteligente: una combinación de paneles solares, baterías, sensores y plataformas digitales.
Te puede interesar
-

Empresas
Precio de techos solares ha caído 25% en cuatro años
“El cambio regulatorio no frena el crecimiento de la energía solar, la obliga a ser inteligente”, explica Marcos Ripoll, CEO y cofundador de Solar180. “El juego ya no es instalar paneles, es gestionar tu energía. El negocio ahora es no vender esa energía barata a la red, sino almacenarla en baterías y usarla tú mismo en la noche para evitar comprar energía cara”.
En la práctica, un sistema inteligente puede programar el aire acondicionado o la maquinaria pesada para que funcionen en las horas de máxima radiación solar, usando energía gratuita y guardando el resto en baterías para la noche.
