Interdependencia económica México – Estados Unidos
La actual guerra comercial entre Estados Unidos y China por la supremacía económica, militar y tecnológica, ha significado para México un beneficio al aumentar de manera notable las exportaciones hacia Estados Unidos. Nuestro país se ha convertido en uno de los principales socios comerciales. En el 2024 el valor del intercambio comercial entre México y Estados Unidos fue de 930,000 millones de dólares. Las exportaciones mexicanas ahora representan del PIB el 37 por ciento.
Si se agregan los ingresos por las remesas que envían los trabajadores mexicanos a sus familiares en nuestro país, así como el turismo norteamericano que llega a México y la inversión extranjera directa de Estados Unidos, ello suma el 50% del PIB del país. Este es el efecto de la relación de México con Estados Unidos.
También hay un proceso de relocalización incipiente de cadenas productivas en México que impulsa Estados Unidos para reducir la dependencia de Asia, principalmente de China. Ello significa la necesidad en México de una mejor infraestructura, capacitación de la mano de obra, seguridad, Estado de derecho. Y realizar una coordinación entre el gobierno, los empresarios y la academia.
Asociado al avance del país está la necesaria canalización de mayor financiamiento por parte de la banca de desarrollo para las micro, pequeñas y medianas empresas para dar el salto tecnológico y convertirse en proveedoras de procesos productivos de las empresas que están llegando al país a la industria aeroespacial, automotriz, la de semiconductores, la producción de insumos de alta tecnología para el sector médico.
Esta relocalización encuentra en el T-MEC su justificación si se cumplen los requisitos de contenido nacional.
Para el próximo año se hará la revisión del T-MEC. Independientemente de las negociaciones con los responsables operativos es importante reconocer el compromiso asumido hace unos días por los jefes de Estado de Canadá y México de actuar de manera coordinada durante la revisión. Ya hay conversaciones para eliminar aquellas observaciones no arancelarias que el gobierno de EU quisiera incorporar. También está la discusión sobre los tres bloques de aranceles que tenemos encima (migración/fentanilo; automotriz; acero y aluminio). Asimismo, los aranceles que Trump quiere poner a semiconductores, camiones, turbinas, cobre. Y evitar su intención de hacer permanentes los aranceles “base” como les llama.
Trump sabe de nuestra interdependencia y quiere más ingresos aplicando aranceles a nuestras exportaciones. Los negociadores mexicanos tendrán como en el pasado un “cuarto de junto” integrado por expertos en todas las actividades económicas para tener respuestas favorables del proceso.