Emilio “Chai” González reconoce sus fortalezas para el nivel PGA TOUR

En San Miguel de Allende, Guanajuato lo conocen como “Chai”, no precisamente se refieren a él como Emilio González. El pueblito mexicano es su “santuario” y el punto de partida de una vida dedicada al golf. Desde los 4 años pisó los campos de golf, especialmente, el Club de Golf Malanquín. Sus padres le inculcaron este deporte, también a sus dos hermanos: Ricardo y Regina.
Hoy tiene 27 años y la tarjeta para disputar torneos del PGA TOUR en el 2026. Con él, México ha tenido 14 representantes en el circuito, siendo Antonio Cerda el primero en 1955 y el último, Raúl Pereda en 2024. Precisamente, hace un año, Emilio estuvo muy cerca de saltar al siguiente nivel, es decir, su historia de ascensión en el ranking mundial (141°) y en el Korn Ferry Tour (4°) – o segunda división – ya habría sido contada.
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Pero los tiempos del golf son perfectos. Emilio “Chayote” – su apodo de la infancia – o “Chai” atendió a El Economista tres días después de ganar el Korn Ferry Tour (KFT) en Albertsons Boise Open. Escaló de la posición 12 a la 4 en ese ranking. Su meta es terminar la temporada en la primera posición.
—¿Consideras que fue mejor ganar la tarjeta PGA TOUR este año?
“Por algo siempre pasan las cosas, pero honestamente aprendí mucho del año pasado, estuve cerca a fin de año que jugué muy bien. Simplemente, vi hacia atrás y creo que no estaba listo, quizá. Agradezco que la vida me dio un año más de crecimiento y vi que todavía tenía mucho por crecer en el Korn Ferry Tour. Verlo con esa perspectiva ayuda mucho porque sin duda, tenía muchas cosas que aprender, a pesar de saber que estaba en el camino correcto y haciendo las cosas bien. Es muy fácil decirlo ahora”.
—¿Cuáles son tus fortalezas para mantenerte en el circuito?
“Honestamente, hago un buen trabajo aprendiendo. Si me tropiezo, hago conciencia sobre lo que sucedió, el por qué e intento no cometer el mismo error, pero si lo vuelvo a hacer, seguiré creciendo, desarrollando una buena actitud en este tipo de cosas. Es un deporte con mucha adversidad y lidiar con eso es muy importante. A veces puede ser, un estilo de vida muy solitario y tener un equipo de trabajo y apoyo tan sólido, me ha impulsado a ser muy feliz haciendo esto, me mantiene motivado.