“La gentrificación en la Ciudad de México no es el problema, sino el síntoma”: Urbanistas

La gentrificación en la Ciudad de México no debe entenderse como la raíz de los problemas urbanos, sino como un síntoma de una omisión estructural de largo plazo, según especialistas del Colegio de Urbanistas de México (ECUM).
A través de un análisis, los urbanistas Juan Carlos Zentella Gómez, Nina Carolina Izábal Martínez y Iván Amador, remarcaron que el “elefante en la sala” es el desplazamiento de población, producto de políticas públicas ineficaces y una gestión territorial deficiente.
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“La carencia de producción sostenida de vivienda asequible y la mala gestión territorial son los motores principales del encarecimiento residencial y de la gentrificación en la Ciudad de México y su zona metropolitana”, se lee en el estudio del Colegio.
La gran deuda en vivienda
Para Izábal Martínez, presidenta del ECUM, la caída en la construcción de vivienda es uno de los factores más alarmantes del panorama urbano actual, pues su ausencia ha provocado un encarecimiento generalizado que expulsa a miles de familias de las zonas centrales.
En el 2018, la capital producía en promedio 20,000 viviendas nuevas al año, frente a una demanda estimada de 70,000 unidades. Para el 2025, la situación se ha vuelto crítica: la proyección anual es de apenas 2,000 viviendas, con sólo 707 registradas en el primer semestre.
De acuerdo con el Colegio, esta producción cubre menos del 1% de la necesidad anual, lo que genera una “brecha insostenible que alimenta el encarecimiento”.
“Esta caída no es un fenómeno aislado ni reciente: es el resultado de una acumulación de omisiones políticas, fallas institucionales y dinámicas especulativas que han convertido el acceso a la vivienda en un privilegio, y no en un derecho”, advierte el Colegio.
Soluciones insuficientes
La creación de instancias gubernamentales y programas recientes no ha logrado revertir la crisis, añaden los urbanistas.
En palabras de Izábal Martínez “la creación de entidades como la Secretaría de Vivienda de la Ciudad de México ha sido más un acto de maquillaje que una solución real”, ya que no se les dota de presupuesto, personal ni atribuciones suficientes para operar.
En cuanto al Bando 1, estrategia presentada por el gobierno capitalino para combatir la gentrificación, Zentella Gómez reconoció que “construir más vivienda social es necesario, pero insuficiente si no se acompaña de instrumentos fiscales y jurídicos que regulen el mercado”.
Nuevos modelos de vivienda
Los especialistas coinciden en que el mercado inmobiliario mexicano es “monopólico, poco transparente y con asimetrías de información muy importantes”. Por ello, sostienen que la construcción de vivienda social debe ir de la mano con instrumentos fiscales, jurídicos y urbanísticos que permitan al Estado intervenir de forma más efectiva en el mercado.
Entre las medidas que propone Zentella Gómez se encuentran:
- Impuesto a la plusvalía.
- Predial progresivo.
- Edificación forzosa tras periodos de especulación.
- Zonificación incluyente.
Además, plantea la necesidad de diversificar los modelos de acceso a la vivienda con esquemas como la renta social y las cooperativas de vivienda, que han demostrado eficacia en países como Uruguay, España y Corea del Sur.