El problema del costo en épocas de alta volatilidad
En artículos recientes hemos comentado que la incertidumbre es la constante en muchos ámbitos, pero sobre todo en el empresarial. Desde eventos naturales, pasando por guerras y ocurrencias políticas hasta la especulación y la escasez de recursos derivado de eventos naturales o decisiones humanas, todo tiene algún nivel de incertidumbre.
A mayor incertidumbre, es mayor la posibilidad de alta volatilidad en los precios de los recursos necesarios para operar. La escasez y la abundancia pueden ser factores de volatilidad en los precios. La volatilidad genera una mayor dificultad para poder planear un desarrollo económico estable de los negocios que las empresas llevan a cabo.
La escasez y la abundancia son factores claves para que existan las condiciones de que hayan mercados especulativos de las materias primas, insumos o servicios que las empresas utilizan para crear bienes o servicios.
En este artículo cuando nos referimos al costo, estamos hablando del costo de producción y ventas. El cual, utilizando la técnica de costeo absorbente, está definido por la suma de el costo de adquisición de la materia prima utilizada, los insumos, el costo del personal involucrado en la producción más los costos indirectos prorrateables, como son energía, agua, depreciación de equipo e instalaciones y costos de supervisión y otras áreas de servicio a la producción necesarios para la manufactura del bien o servicio que la empresa venda o provea.
De todos los elementos de costo arriba mencionados, los que están más sujetos a la volatilidad de sus precios son la materia prima y los insumos, que pueden llegar a representar hasta el 90% del costo de producción (esto dependiendo de la industria y de la disponibilidad que el mercado tenga de esos productos).
La administración de la empresa tiene la obligación de proteger la actividad productiva de la misma, aún en épocas de alta incertidumbre y volatilidad. Para esto tiene que implementar acciones dirigidas a asegurar la continuidad de las operaciones y planes. Entre otras formas, podrá llevar a cabo acciones como las siguientes:
Mantener una vigilancia constante de los mercados relevantes para la empresa, tanto de materias primas e insumos como de los productos que ofrece al mercado, con objeto de implementar acciones preventivas con oportunidad.
Asegurar el suministro de las materias primas, insumos y servicios necesarios mediante la creación de relaciones solidas y confiables con proveedores que aseguren tanto el suministro como la estabilidad de precios, la diversificación de proveedores y fuentes de suministro, que prevengan contingencias con los mismos y que aseguren alternativas de suministro, la obtención de contratos de suministro de largo plazo en aquellas materias primas o insumos naturalmente escasos o que dependan de pocos proveedores y las compras anticipadas sobre productos que sean naturalmente escasos o que se puedan anticipar su la escasez.
Adicionalmente la administración tiene que vigilar que los niveles de inventarios de materias primas, insumos y producto terminado sean óptimos a las circunstancias del mercado y que no exista la posibilidad de que haya inventarios insuficientes en épocas de escasez que provoquen la imposibilidad de tener los productos que ofrecer al mercado, o excesivos en épocas de abundancia que provoquen pérdidas en el valor de las existencias por una caída en el precio de los productos que se ofrecen al mercado.
Por último, la estabilidad de los precios de las materias primas y de los insumos tiene que asegurarse con la contratación oportuna de instrumentos de cobertura de variaciones en precio y de tipo de cambio. A este respecto, también es conveniente que la empresa procure tener un adecuado equilibrio entre el valor de sus activos y de las obligaciones (tanto en tipo de cambio como en precios), a fin de contar con coberturas internas que la protejan de variaciones abruptas en precios o tipos de cambio.