La IA no es solo ChatGPT: Oracle y los jugadores invisibles
¿Cuál es el primer nombre que te viene a la mente cuando escuchas Inteligencia Artificial? Sí, seguro pensarías en ChatGPT, Gemini, DeepSeek o en esas herramientas que ya usas o que al menos has visto en redes. ¿Pero qué hay de los jugadores invisibles? Esos que están detrás de la IA y que hacen posible que todo funcione.
Porque para entender cómo funciona este complejo universo, necesitamos saber quiénes la operan. Consideremos que para que la IA funcione se requiere una infraestructura complejísima que incluye servidores, chips especializados, plataformas para análisis de datos, herramientas de desarrollo y, sobre todo, especialistas que operan ese ecosistema en silencio.
Hoy quiero que hablemos de uno de esos jugadores invisibles: Oracle, con quien platiqué hace poco. ¿Te suena? Tal vez no, pero lo más probable es que hayas usado su tecnología de IA hoy mismo, sin darte cuenta.
- Cuando pagas en el supermercado y el sistema detecta si hay un problema con tu tarjeta o ajusta los precios según las ofertas.
- Cuando en un hospital, tu expediente médico sugiere un diagnóstico basándose en tus síntomas y tu historial clínico.
- En tu banco, cuando una IA analiza tu historial y aprueba (o rechaza) un crédito en segundos.
- O al presentar tu declaración de impuestos y el sistema detecta una anomalía, sin que tú hayas notado el error.
Todo eso que vemos como cotidiano desde hace años, está operado con Inteligencia Artificial. Y detrás, hay empresas como Oracle.
“El chiste es que no te des cuenta. Nosotros no vamos por récord de herramientas. Vamos más allá: queremos que la IA sea útil en tu vida”, me dijo Fernando Irure, director de crecimiento de Oracle y vocero de programas educativos.
Pero Oracle no es precisamente un jugador anónimo o pequeño, y por eso vale la pena conocerlo. Su papel en la IA es cada vez más fuerte, incluso aquí, en México.
Por ejemplo, está construyendo una de las supercomputadoras de IA más grandes del mundo en la nube (para los fans de los datos técnicos, puedes ver más en este enlace). ¿Y qué significa eso? Piensa en una autopista. Esa supercomputadora será una red de miles de GPUs (un tipo de chip especializado) que puede procesar información a velocidades altísimas. Cualquier empresa, gobierno o startup podrá “rentar un carril” en esa autopista para entrenar su propia IA, sin necesidad de invertir millones en su propia infraestructura. Con esto, Oracle no estaría haciendo la IA más inteligente, sino más accesible.
Asimismo, Oracle formará parte de una empresa conjunta con OpenAI (sí, los creadores de ChatGPT) y Softbank, con el objetivo de construir más infraestructura de IA en Estados Unidos. Donald Trump ha asegurado que este proyecto creará más de 100,000 empleos en ese país. (Dato curioso: 70% de la IA está en Estados Unidos)
¿Y México? Según el Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial 2024, nuestro país ocupa el sexto lugar en adopción de la IA, con fortalezas en investigación y desarrollo. Y según Statista, la IA podría aportar hasta un 6.2% adicional al PIB nacional hacia 2030. Y sí, Oracle también está en México.
“Mucho de lo que Oracle hace, está hecho aquí”, me explicó Irure.
Actualmente, esta empresa estadounidense tiene dos centros de desarrollo fuera de EU: en India y en México. El de México está en Jalisco y cuenta con más de 3,200 colaboradores. Desde ahí, se desarrollan soluciones para problemas del futuro (ya van más de 40 patentes registradas), como un sistema que examina enormes extensiones agrícolas en minutos, optimizando la productividad y reduciendo el desperdicio.
Y como muchas empresas enfocadas a la IA, Oracle también apuesta fuerte por la educación. Desde hace cinco años impulsa el programa Oracle Next Education (ONE), una plataforma 100% virtual y gratuita que ha capacitado a casi 20,000 estudiantes mexicanos
También está Oracle Academy, un programa filantrópico que ofrece recursos gratuitos a docentes de todo el mundo. En México, ha apoyado a 6,300 instituciones educativas públicas, más de 29,000 docentes y cerca de 500,000 estudiantes.
Más allá de los datos curiosos de una empresa, entender quiénes están detrás de la Inteligencia Artificial que usamos todos los días no solo es útil: es urgente. Porque la IA no es solo chats o asistentes de voz. Hay infraestructura, ciencia, talento, y sobre todo, decisiones políticas y económicas detrás de cada avance.
Y como usuarios, saber esto nos permite opinar, participar y cuestionar. Así que ya estaremos hablando en este espacio de otros jugadores invisibles que también están participando, como Nvidia, IBM, Huawei, Alibaba, entre muchos otros.
De pronto, la próxima vez que uses alguna herramienta de Inteligencia Artificial, recuerda: no todo está en la pantalla. A veces, lo más poderoso está… detrás del telón.
*Esta columna quincenal, llamada “IA: Integrados y Apocalípticos” filosofa sobre la Inteligencia Artificial, con sus pros y contras y cómo se va integrando en la vida cotidiana.