Telefónica vende su negocio en Uruguay por 440 millones de dólares

La estrategia de salir de Latinoamérica – con la excepción de Brasil -, que marcó Marc Murtra al asumir la presidencia de Telefónica, se está cumpliendo a pasos acelerados.
La compañía comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el acuerdo alcanzado para la venta de la totalidad de sus acciones en Telefónica Móviles del Uruguay a Millicom Spain, por valor de 440 millones de dólares estadounidenses, que al cambio actual representan unos 389 millones de euros, representativas del 100% de su capital social.
En el hecho relevante enviado a la autoridad regulatoria, la segunda operadora de España aclara que con esta operación, que está a la espera de determinadas condiciones de cierre, incluyendo la aprobación de las autorizaciones regulatorias correspondientes, “Telefónica avanza en su plan de reducir la exposición en Hispanoamérica”.
Así, la venta de la filial uruguaya que usa comercialmente la marca Movistar se suma a las desinversiones en Colombia, Argentina y Perú. Los analistas coinciden en señalar que Millicom Spain no encontrará serias resistencias para hacerse con los correspondientes permisos regulatorios ya que no opera en Uruguay. Por otra parte, Millicom Spain y Telefónica ya saben lo que es hacer negocios juntos. Movistar Uruguay es el segundo operador móvil del país con cerca del 29% de los accesos a marzo del 2025, muy por detrás de la estatal Antel, y seguida por Claro, del magnate mexicano Carlos Slim.
También conviene destacar que Telefónica en Uruguay cuenta con una cobertura que alcanza el 97% del territorio, lo que le permite presumir de un importante volumen de clientes 4G. Por otra parte, la teleco tiene licencias en las bandas de 850 MHz, que les permiten ofrecer servicios de telefonía 2G y 3G, así como espectro en la banda de 700 MHz y 1,900 MHz, para conectividad de 4G y 5G.
La cartera de negocios de Movistar Uruguay incluye, además, servicios para el mercado de empresas, gracias una red de más de 70 tiendas propias y agentes, así como con 1,300 colaboradores directos e indirectos y más de 5,000 proveedores y socios estratégicos. La compañía, cuya presencia en América Latina sólo se remitía a Bolivia y Paraguay, emitió un comunicado en el que expresa que esta operación le permite consolidar su posición de liderazgo en la región.
El lastre que representó para los resultados del Grupo Telefónica las operaciones en Argentina y Perú se explica por las minusvalías contables de estas dos filiales que alcanzaron 1,731 millones de euros en el primer trimestre de este ejercicio, y que ocasionaron unas pérdidas netas de 1,304 millones. Telefónica Brasil, en cambio, logró crecimientos interanuales en las principales áreas de negocio de enero a marzo de este año, hecho que elevó el beneficio en un 18%, hasta los 1,100 millones de reales, cifra que en euros representa 168 millones. Estos números explican, en parte, el interés de Telefónica de profundizar su presencia en el gigante sudamericano.