Trump en Arabia
Ninguna sorpresa en que Donald Trump volviera a elegir Arabia Saudí para el primer viaje al extranjero de su nuevo mandato (aunque la asistencia al funeral del papa Francisco lo haya convertido en el segundo). Las relaciones de EE UU con las monarquías de la península Arábiga se fundan en intereses compartidos: son las principales compradoras de armas a las empresas norteamericanas y albergan bases militares clave para la proyección de poder de Washington hacia Asia. Además, en los últimos años ejercen de útiles mediadores diplomáticos. Pero, sobre todo, los monarcas árabes saben cómo ganarse al inquilino de la Casa Blanca.