Sólo uno de cada cuatro jefes está comprometido con su trabajo

Los jefes —no los empleados— protagonizan en la actualidad una crisis generalizada de compromiso laboral. Por primera vez, Gallup identificó que la desconexión emocional impacta con más fuerza a quienes lideran equipos, lo que podría tener consecuencias directas en el desempeño organizacional y la productividad.

Según el reporte Estado del lugar de trabajo global 2025 de la firma, sólo el 27% de los jefes a nivel global expresa sentirse comprometido con su empleo, esto representa una caída de 3.5 puntos porcentuales respecto de la medición del año anterior y marca un punto de quiebre: ahora son los mandos medios quienes están más desconectados de su trabajo.

De hecho, este es el porcentaje más bajo de compromiso laboral de las personas en jefaturas en las empresas desde que Gallup comenzó a levantar el reporte en 2009. Para los empleados en general, este indicador se mantuvo en 18% en el comparativo anual.

A decir de Jon Clifton, CEO de Gallup, estas cifras adquieren mayor relevancia en un contexto de transformación acelerada del mundo laboral, impulsado principalmente por la irrupción de la inteligencia artificial en la vida cotidiana del trabajo.

“El informe Estado del lugar de trabajo global 2025 ofrece quizás la última fotografía de una fuerza laboral al borde de un cambio sísmico. Los datos muestran que los empleados —en especial los jefes— se sienten desconectados, lo cual no augura una buena preparación ante un futuro moldeado por la inteligencia artificial. Y, al mismo tiempo, las herramientas que podrían mejorar el compromiso y el rendimiento están llegando con una rapidez asombrosa”, expresó el ejecutivo.

La consultora destaca que gran parte del cambio en el sentir de los jefes es resultado del desgaste vivido en medio de las demandas por la contingencia sanitaria por la Covid-19. “Desde la pandemia, se les ha pedido a los jefes que resuelvan el dilema entre las nuevas exigencias ejecutivas y las expectativas de los empleados. Estamos empezando a ver las consecuencias”, se señala en el documento.

Por rangos de edades, el mayor impacto se dio entre los jefes menores de 35 años, cuyo nivel de compromiso laboral pasó de 32 a 27%; para los mayores de 35 años, bajó de 29 a 27 por ciento. En tanto, por género, el principal efecto se registró entre las mujeres en posiciones de jefatura, con una disminución de 34 a 27%; en el caso de los hombres, de 28 a 26 por ciento.

Impacto directo en los equipos de trabajo

El informe advierte que el compromiso del liderazgo tiene un efecto directo en el compromiso de sus equipos y, en consecuencia, en la productividad. De hecho, el 70% del desempeño de los colaboradores está relacionado con el impacto de su jefe inmediato. De manera que si un líder se muestra desconectado, abrumado o indiferente, es muy probable que sus equipos lo reflejen.

El desempeño empresarial —y, en última instancia, el crecimiento del PIB— está en riesgo si los líderes ejecutivos no abordan el desgaste de los mandos medios”, se advierte el reporte.

“El desempeño empresarial —y, en última instancia, el crecimiento del PIB— está en riesgo si los líderes ejecutivos no abordan el desgaste de los mandos medios”, se advierte el reporte.

Ante este contexto, el informe presenta tres recomendaciones para que las empresas atiendan esta realidad y refuercen el compromiso de las personas en posiciones de jefatura:

» 1. Garantizar entrenamiento básico para todos. Gallup advierte que sólo 44% de los mandos medios afirma haber recibido capacitación formal para su rol, carencia que está directamente relacionada con mayores niveles de desconexión laboral. Permitir que todas las personas en jefaturas accedan a esta formación permitiría reducir casi en la mitad la escasez de compromiso.

» 2. Enseñar habilidades efectivas de coaching. Contar con habilidades de coaching no es algo natural para la mayoría de los mandos medios, implementarlo puede aumentar hasta en 22% sus niveles de compromiso laboral, y hasta 18% el de sus equipos. Incluso, los ejercicios llevados a cabo por la firma demuestran que los indicadores de desempeño de los mandos medios pueden aumentar hasta 28% con capacitación especializada.

» 3. Invertir en el desarrollo continuo del bienestar de los líderes. El desarrollo profesional no sólo impacta en las habilidades laborales, también mejora el bienestar personal de las personas en roles de liderazgo. La capacitación, afirma Gallup, aumenta de 28 a 34% los niveles de bienestar; cuando esto es permanente, hasta 50 por ciento.

“Es momento de replantear el rol de los jefes. El compromiso de los mandos medios es clave para revertir la caída de la productividad, mejorar el bienestar de los empleados y liberar billones de dólares en potencial económico.

“Al redefinir el papel, las expectativas y el apoyo que reciben los jefes, los líderes pueden crear un entorno en el que los mandos medios prosperen —y cuando los jefes prosperan, también lo hacen sus equipos—. La decisión para los líderes ejecutivos es simple: invertir en el futuro del liderazgo o asumir las consecuencias de la inacción”, se advierte en el reporte.

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